




Aprovecho para informaros que ya está disponile en Salamanca Irrepetible la agenda cultural de la ciudad. Pincha aqui para consultarla y no te pierdas nada! ;)
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Y es que el otoño tiene cierto aire de renovación. Llegan los coleccionables al kiosco, los niños vuelven al cole, las revistas de moda nos presentan todo "lo nuevo", la normalidad se apodera del día a día, ¡si hasta cambiamos de crema para hacer frente a las nuevas condiciones climatológicas!
También es la época de hacer cosas nuevas en casa. La ropa de verano sale de nuestros armarios para dejar su hueco a la de invierno, la alfombra vuelve a ocupar su hegemónico lugar en el salón, las mantitas vuelven al sofá, el nórdico sale de su largo letargo para abrigarnos suavemente en esas mañanas de domingo, frías, en las que sacas la naricilla y piensas que en ese momento no existe un lugar mejor en el mundo en el que estar (sobre todo si EL está al lado)...
Y a mi me gusta, me gusta mucho el comienzo de esta estación. Primero porque sus colores me recuerdan siempre a los de la parra que, invitándote a entrar, viste la puerta de entrada a la casa de mis padres. Segundo porque el otoño huele a castañas asadas, a las que nos traía a mi padre quien, nada más entrar por la puerta, expedía un vívido olor (su olor) mezclado con el aroma de las castañas calientes. Y tercero porque el paisaje otoñal invita a las maravillosas tardes de paseo que EL y yo pasamos en algún pueblecito cercano a la ciudad.
Todo esto es el otoño para mi y... ¡me apetecía contároslo!
Feliz semana... ;)
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Como la cosa no está para mucho gasto pues ya sabéis que ahora todos los esfuerzos hay que hacerlos en pos de nuestra Salamanca Irrepetible me puse a pensar y pensar hasta que encontré una solución intermedia.
Que... ¿Cuánto me he gastado? Pues... 0Euros!!! Síiiiiii porque rebusqué y rebusqué hasta que encontré la solución: Un baúl de rattan de cuando mi maridin era soltero y que estaba acumulando viejos papeles bajo a una cama. Ahora sólo me queda encontrar un papel chulo y empapelar el interior del armarito en cuestión que, por ahora, es un pelín soso. Pero... ¡en cuanto tenga un poco de tiempo me pondré con ello! ¿Qué os parece la solución intermedia? ¿Qué tipo de papel utilizaríais para empapelar el armario? Yo había pensado en unas rayas que fueran a tono con las paredes (amarillas) ¿Creéis que quedará bien?